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TE QUIERO UN HUEVO

No se valora lo que se tiene hasta que se pierde. Qué gran verdad. Y sin embargo, con qué facilidad lo olvidamos. Damos por hecho que siempre seguirá ahí. Que será incondicional eternamente, como si nosotros también lo fuéramos. Pero un buen día la vida nos sorprende y nos lo arrebata.

Y ese día llegó y se acabaron los besos y los abrazos. Ahora lo que toca es saludarte con un ligero golpe de codo. Que yo no digo que no tuviera su gracia al principio, pero ya me cansa. Y cada vez que veo a algún familiar o algún amigo me sale de forma instintiva ir a darle un beso y me freno en seco al recordar que por el momento mejor no hacerlo.

Nos ha tocado vivir nuestra propia guerra: una pandemia que está causando mucha hambre de contacto, con posibles secuelas o traumas como la soledad. Hace poco escuchaba hablar por la tele a una señora mayor que decía:  “si no me mata el virus, lo hará la soledad”. Y cuánta razón llevaba esta mujer.

Al escucharla, recordé una historia que nos contó nuestro amigo Joe en el transcurso de una cena divertidísima. Durante la Segunda Guerra Mundial su abuela paterna, de origen judío, huyó de Alemania junto a su único hijo rumbo a los Estados Unidos. El miedo, la incertidumbre y el hambre fueron sus compañeras de viaje. Desde entonces siempre llevaba en el bolso un huevo duro “por si acaso”, decía ella. Y puede que una vez superada esta pandemia todos guardemos en un huevo Kinder abrazos y besos por si las moscas. Por todos aquellos que nunca pudimos dar.

El contacto físico aporta muchísimos beneficios a nuestra salud física, emocional y mental. Tocar a otro ser humano nos permite transmitir mensajes que las palabras o los hechos por sí mismos no son capaces de expresar.  Transmite confianza, seguridad, nos ayuda a ser más sociables y refuerza vínculos afectivos. El afecto físico lo necesitamos todos: los bebés, los niños, los adolescentes, los adultos, los mayores y hasta los animales. Absolutamente todos.

Mejora el desarrollo cognitivo y emocional de los niños ayudándoles a crecer de forma saludable. No es por casualidad o capricho que exista un protocolo llamado piel con piel para los recién nacidos. El contacto físico inmediato del bebé con la madre le proporciona seguridad, tranquilidad, calor y le hace sentirse querido. Por eso reduce el estrés postparto, mejora la lactancia y fortalece el vínculo afectivo.

La piel me parece un órgano fascinante y tiene al mando un gran general: el tacto. Fijaros si es alucinante cómo reacciona que ante una simple caricia se reduce la producción de cortisol, la hormona del estrés. De ahí que el solo hecho de recibir un masaje relaje tanto y nos aporte sensación de bienestar.

Otro de los beneficios del contacto físico es que incrementa la producción del llamado cuarteto de la felicidad: endorfina, serotonina, dopamina y oxitocina. Cada una de estas «inas» aporta su granito de arena para mantener nuestra salud física y emocional.

Las endorfinas son sustancias naturales sintetizadas por el cerebro que entre otras cosas alivian el dolor como podría hacerlo el consumo de opiáceos. La dopamina es ese componente químico que nos “enciende” y que hace que nuestro corazón palpite con más fuerza. Está relacionado principalmente con el deseo y el placer. La oxitocina, también conocida como la hormona del amor, es la encargada de conectarnos con los demás y actúa como un gran desinhibidor. Y por último, la serotonina, conocida como el neurotransmisor de la felicidad, actúa sobre nuestras emociones y nuestro estado de ánimo.

Estoy segura de que a partir de ahora, vamos a valorar muchísimo más los besos y los abrazos, como tantas otras cosas de las que nos hemos visto privados durante este tiempo. Tomar conciencia de que en la vida no hay nada seguro, que nada dura para siempre, nos cambiará la forma de ver las cosas. Y en ese cambio sabremos cuidar y mimar mejor aquello que amamos.

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TERAPIAS NATURALES BENEFICIOSAS FRENTE AL COVID19

El año 2020 pasará a la historia por ser testigo de una de las grandes pandemias que logró paralizar el latido de la humanidad y la actividad económica mundial. A principios de enero llegaban noticias desde China acerca de una enfermedad muy contagiosa, una especie de gripe, que en casos excepcionales podía llegar a ser mortal. Pero aquello ocurría en Asia, muy lejos de Europa, no era “nuestro” problema. Sin embargo, el Covid19 se propagó como la pólvora y llegó a nuestras vidas poniéndola patas arribas. Nos confinó, nos zarandeó y nos despertó de nuestro delirio de omnipotencia: ni somos los amos del mundo ni podemos tenerlo todo bajo control.

Este virus no grato ha llegado a nuestras vidas para quedarse y cambiarla de forma radical. Por el momento no nos queda otra que aprender a convivir con él y adaptarnos a la nueva realidad. Una de las pocas certezas acerca de él es que contagia a través de las vías respiratorias y los pulmones, donde puede desencadenar graves problemas de salud incluso puede llegar a ser letal, sobre todo en aquellas personas vulnerables. Por eso hoy me gustaría hablaros de dos terapias naturales: la haloterapia y la reflexoterapia podal. Además de proporcionar múltiples beneficios para la salud, destacan por su capacidad para equilibrar y reforzar el sistema respiratorio. Aplicadas conjuntamente durante una misma sesión pueden ayudar a reducir la medicación y mejorar la calidad de vida de aquellas personas a quienes este virus ha dejado secuelas físicas en los pulmones[1].

¿Qué es la haloterapia?

Es una terapia totalmente natural, que se puede combinar con tratamientos farmacológicos sin efectos secundarios. Consiste en la respiración de micro partículas de sal de roca dentro de una sala en la que se ha reproducido el clima de las minas de sal. El cloruro sódico es antiinflamatorio, antiséptico y antibacteriano, además de potenciar el sabor de los alimentos. La haloterapia aporta, entre otros, los siguientes beneficios:

  • Induce a la relajación.
  • Reduce la inflamación de las vías respiratorias.
  • Aumenta la capacidad pulmonar facilitando la oxigenación y la expectoración.
  • Mejora problemas respiratorios como bronquiolitis, asma, alergia, sinusitis, rinitis y bronquitis.
  • Alivia problemas dermatológicos como dermatitis atópica, acné, psoriasis y eccemas.

[1] Los pacientes post-covid, que hayan tenido graves problemas vasculares como por ejemplo trombos, no podrán recibir el tratamiento conjunto hasta haber solucionado dicha patología y siempre se realizará bajo consentimiento o autorización médica.

La haloterapia se popularizó en el siglo XIX gracias a los estudios publicados en 1843 por el doctor Feliks Boczkowski. Este médico llegó a la conclusión que la inhalación de micro partículas de sal suspendidas en el ambiente de las minas de Wieliczka (Cracovia) protegió a los mineros de padecer problemas pulmonares, respiratorios o tuberculosis que afectaban al resto de la población. A partir de entonces, se fueron abriendo sucesivamente sanatorios para los asmáticos en cuevas de sal naturales de toda Europa como en Alemania, Suiza, Hungría, Bulgaria y la antigua Yugoslavia.

La reflexoterapia podal, por su parte, no solo va a equilibrar a nivel energético y físico el organismo. Sino que además va a reforzar y potenciar los efectos beneficiosos de la haloterapia mediante la estimulación de los puntos reflejos del aparato cardiorespiratorio en el pie; ambas terapias logran mejorías muy similares en los pulmones como son:

  • Aportar mayor oxigenación a los tejidos y por lo tanto aumentar la vitalidad.
  • Descongestionar las vías respiratorias altas.
  • Ayudar a la expectoración del moco y producir efectos depurativos, especialmente en personas fumadoras.

Por eso quienes experimenten conjuntamente las dos terapias van a sentir casi de inmediato que respiran mejor, más despacio y más profundamente[1].

El Covid19 ha generado mucho sufrimiento, aunque también ha despertado y ha sacado lo mejor de nosotros como sociedad. Nos ha devuelto la empatía hacia el sufrimiento ajeno y nos ha hecho ser más solidarios. También nos ha recordado que la vida se puede escapar en un suspiro. Te propongo disfrutar de la vida a pleno pulmón. Cuídate y regala salud a quien más te importa. Nosotros te podemos ayudar a conseguirlo.

[1] La reflexoterapia podal tiene una serie de contraindicaciones, que se deben de respetar. Ante cualquier duda, consúltenos.